martes, 9 de julio de 2013

ALGUNAS COSAS QUE ME GUSTARÍA APRENDER...

Siempre he admirado las habilidades de modista de mi madre o mi hermana, la capacidad de mi padre por reconocer a un pájaro por su canto, el conocimiento de las estrellas y constelaciones que tienen ciertos viejos marineros o la capacidad de bailar de algunas personas a las que ni siquiera conozco. Me gustaría ser capaz de saber tratar a un desconocido o desconocida cuando me interesa, o de recordar los nombres de alguien a quién me presentan, sin haberlo olvidado a los cinco minutos. Me encantan las cosas creativas, las técnicas antiguas, lo natural...


Hacía tiempo que quería escribir un artículo sobre todo esto, sobre las cosas que me gustaría aprender, y de quién, especialmente de la gente que me rodea o que amo. Muchas de estas cosas son actividades básicamente manuales, creativas: coser, trabajar las pieles, pintar, forjar... Sin embargo hay más, mucho más que eso, hay también un conocimiento tradicional, puede que incluso científico, pero un conocimiento, que tal y como yo lo veo es un conocimiento que podemos transmitirnos los unos a los otros.

¡He aquí una breve lista de las cosas que más me gustaría aprender! No son las más necesarias, ni las más básicas en el mundo actual, en el mundo en el que vivimos y en el que muchas cosas ya nos vienen hechas, listas para comprar, consumir, usar y tirar... Pero yo quisiera ir más allá, el conocer por el placer de hacerlo, el conocer por el placer de ser más natural, de aprovechar al máximo algo con conocimiento de causa... El conocimiento recicla, se autoalimenta, estimula la imaginación...

Vivimos en un mundo que nos duerme los sentidos, que nos hace olvidar que es trabajar usando las manos, la vista, el olfato, los oídos, el gusto, el sabor... poniendo los cinco sentidos en algo hecho con verdadero amor e ilusión.

Hay algunas cosas que me gustaría aprender... y disfrutaría con ellas.

33 COSAS QUE ME GUSTARÍA APRENDER

  1. Acordarme de los nombres de las personas que he conocido o me han presentado alguna vez, o al menos de aquellas con las que voy coincidiendo regularmente. ¡Soy muy malo en eso, lo reconozco! A veces incluso se me olvida los nombres de gente que conozco de hace años, quedándome en blanco, aunque minutos después (a veces puede que días) recuerde sus nombres.
  2. Ampliar mis conocimientos de entomología.
  3. Aprender a bailar. Simplemente para disfrutar más y mejor de los bailes, y permitir que la gente disfrutasen más y mejor conmigo.
  4. Aprender a buscar cosas por Google (e internet en general) y dar rápidamente con ellas. Esto es algo que me ahorraría mucho tiempo y, realmente, me resultaría muy útil.
  5. Aprender a cazar y pescar para motivos de supervivencia. No es nada personal, amo la vida y a los animales, y no cazaría ni pescaría simplemente por placer, pero me gustaría saber como conseguir mi propia comida animal en el caso necesario, y ser capaz de aprovechar todo lo cazado (carne, pieles, plumas, huesos), al modo de las antiguas tribus.
  6. Aprender a consolar a las personas que lo necesitan, desde las palabras, o mejor aún, desde el silencio. Aumentar, en consonancia, mi empatía.
  7. Aprender a coser a mano y a máquina, bordar y otras técnicas de modista (como la creación y uso de plantillas), tal como mi madre ha hecho siempre. Ser capaz de confeccionar mis propias piezas de ropa o de disfraces, y ser capaz de repararlas llegado el momento. Sería bastante creativo en ese sentido, lo sé, y creo que tiraría mucho de parches y añadidos que darían más personalidad a mi ropa.
  8. Criar mis propios animales para obtener alimento, con todo lo que ello comporta: sacrificio del animal si es el caso, desollamiento de su piel, y el aprovechamiento máximo de todo él. Sé que para algunos este concepto puede ser algo salvaje, pero desde luego me parece mucho más humano que criar animales en masa en granjas industriales para comercilizarlos como alimento en masa. ¿Alguien se ha preguntado cuanta de la comida que desperdiciamos cada día eran seres vivos que han muerto por nada, desechados como sobras y basura? Yo hablo de aprovecharlo todo y honrar al animal mismo que nos alimenta, un concepto primitivo, quizás, pero más espiritual que el de ver al animal (si es que alguien lo ve ya cuando compra croquetas, por poner un ejemplo) como una simple mercancía.
  9. Aprender a curar con técnicas manuales y naturales, tanto a personas, como animales y plantas.
  10. Aprender a dibujar y pintar con ordenador. Dibujar nunca se me ha dado mal, pero lo de pintar nunca lo he dominado...
  11. Aprender a discernir lo que me conviene de lo que no. Sólo con eso, uno puede tener la vida solucionada.
  12. Aprender a filmar y montar películas, y a usar ciertos efectos digitales. Me haría gracia poder realizar mis propios pequeños films, falsos tráilers, anuncios o cortometrajes.
  13. Aprender a acercarme, hablar y entablar una conversación con personas desconocidas. Se me da bien hacerlo... ¡excepto cuando realmente me interesa conocerlas! ¡Jajajajaja! Me gustaría vencer parte de esa timidez.
  14. Aprender a hablar inglés medianamente bien. Siempre me he defendido bien leyéndolo o escribiéndolo, pero no hablándolo. ¡Ya tocaría!
  15. Aprender a hacer fuego con técnicas manuales, básicas y primitivas. Simplemente para saber que soy capaz de hacerlo llegado el caso de necesidad.
  16. Aprender a que ciertas cosas me importasen menos. Una buena manera de librarse de algunas preocupaciones banales, no dándoles más importancia de la que tienen.
  17. Aprender a desaprender, aprender a volver atrás y rectificar los pasos. Desaprender a veces es la manera de aprender algo por un nuevo camino.
  18. Aprender cuentos y leyendas de tradición oral. Ser capaz de entablar conversaciones sobre estos temas con viejos y ancianos, gente de montaña, campo o mar que recuerdan las viejas historias y cuentos, y ser capaz de transcribirlos y contarlos yo mismo de viva voz.
  19. Aprender a tallar las piedras con técnicas primitivas. Ser capaz de crear pequeñas herramientas, objetos y utensilios, y crear pequeños relieves o dibujos en ellas.
  20. Aprender conocimientos básicos de electricista, fontanero y paleta. ¡Básico para el hogar!
  21. Aprender conocimientos básicos de herrería y forja de metal, con los que poder fabricar pequeños inventos o piezas de metal u orfebrería.
  22. Aprender fotografía. No sólo a fotografiar, sino a posar, a captar luces y sombras y retocar las imágenes. Aprender a fotografiar pájaros, insectos, paisajes, personas y momentos.
  23. Botánica. Aprender a distinguir las distintas especies vegetales, distinguiendo no sólo un árbol de otro, sino una hierba de otra. Distinguir las setas comestibles de las incomestibles.
  24. Carpintería. Aprender a utilizar la madera para hacer todo tipo de objetos, útiles o simplemente decorativos; desde una mesa a una silla, a simples piezas, como cajas o estuches.
  25. Comprender a las mujeres... ¡y a los hombres! En realidad cada vez comprendo menos a ambos, y ya puestos, a la humanidad en general.
  26. Conocimientos agrícolas. Saber que plantar, donde, como y cuando, y rentabilizar al máximo estos conocimientos para ser capaz de cultivar buena parte de mi propia comida.
  27. Cultivar la paciencia y la perseverancia. Muy importante, especialmente esta última...
  28. Aprender a curar, curtir y trabajar las pieles y el cuero. Ser capaz de hacer cinturones, bolsas, sombreros, brazales o piezas de armaduras con todo ello.
  29. Disfrutar más de la vida. Aprender a disfrutar mucho más de las pequeñas cosas (que ya lo hago) y librarme de las preocupaciones mundanas provenientes del mundo humano sin sentido.
  30. Entender las matemáticas hasta el punto de llegar a amar los números.
  31. Interpretar o escribir música la música que a veces imagino.
  32. Reconocer a los animales por el canto o sonido que emiten, o reconocerlos por su olor, tal y como es capaz de hacer mi padre. Conocer los nombres de estos animales tanto en castellano como en catalán.  Reconocer sus huellas y sus rastros.
  33. Reconocer las estrellas y constelaciones. Ser capaz de mirar el cielo y no ver sólo caos, sino un mapa del universo.

3 comentarios:

  1. Algunes les comparteixo.Les altres, no. Però està bé tenir tantes coses per aprendre!

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  2. Nunca es tarde para seguir aprendiendo! O, al menos, eso es lo que me digo a mí misma cada vez que me doy cuenta de que ha pasado otro año y sigo sin saber tocar el piano o el celo, ni aprender japonés, ni bailar swing o syrtáki (dansa griega), ni tantas cosas.... En fin, lo importante es seguir teniendo ganas de aprender! ;)

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  3. Una GRAN LISTA, con tantas cosas en mente, igual tienes que empezar YA! :P

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